Monserrat era una soprano que fundó, junto a su marido Jordi Savall, alguno de los mejores grupos de música especializados en la época antigua: Hespèrion XX, La Capella Reial de Catalunya y Le Concert des Nations.
Cuando yo era un estudiante de música descubrí, con gran asombro, que existía un grupo de músicos en nuestro país que se dedicaban a la difícil tarea de recuperar la música antigua. Con el matrimonio Savall- Figueras conocí la música sefardita, la música de la corte de los Borgia, pero especialmente me impresionó el trabajo realizado sobre el Llibre Vermell de Monserrat y el Canto de la Sibila.
Monserrat y Jordi creían que la voz humana era el modelo más perfecto y expresivo del canto melódico, como única vía para acentuar el sentido de la palabra. De este modo destacaron como los máximos exponentes de la música anterior a 1800, a la que dieron un nuevo enfoque estilístico.
El Canto de la Sibila es un drama litúrgico que se canta en Mallorca durante la Misa del Gallo. Este canto fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 2010. En este drama se profetiza el fin del mundo por parte de La Sibila: profetisa de la mitología clásica que se adapta al cristianismo con el concepto del juicio final. La noche de Navidad se interpreta este juicio final en el que los buenos y los malos tendrán su recompensa o su castigo.
Esperemos que Monserrat reciba su recompensa por habernos dejado tantos momentos mágicos con su voz. Descanse en Paz.
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