Si hablamos de danzas que identifican a regiones o mejor dicho, a provincias argentinas tenemos que nombrar a la CHACARERA.
Hablar de chacareras es hablar de Santiago del Estero, Madre de Ciudades porque fue la primera fundada por los españoles allá por 1553.
La chacarera es una danza vivaz que, como la mayoría de las danzas folklóricas argentinas se baila en parejas sueltas e independientes, o sea que los bailarines no se tocan y las parejas hacen solas sus evoluciones.
Su ritmo es ágil y su carácter es alegre y festivo. Siempre fue muy aceptada tanto en el ambiente rural, como en los salones cultos. Es una de las pocas vigentes, o sea que se que se la baila en casi todo el territorio, principalmente el norte, noroeste y centro del país.
Hay pocos documentos que nos hablan de su historia, mencionan que sería una de las danzas más antiguas, pues se la baila en Tucumán desde 1850.
Musicalmente consta de cuatro fases en las cuales se cantan las coplas y un interludio que es solamente instrumental, intercalado después de la primera y segunda copla y también sirve de introducción. Las coplas que se cantan son cuartetas octosilábicas con rimas en los versos pares.
El acompañamiento musical que se utiliza es de guitarra, violín, acordeón y por supuesto, el bombo, que se luce con sus típicos repiques. En la coreografía se introduce una figura especial que es el avance y retroceso, que consta de cuatro compases. Al igual que en todas las danzas argentinas, consta de dos partes. La segunda se baila idéntica a la primera, pero invirtiendo la posición inicial.
Chakai Manta es otra de las chacareras más escuchadas. En esta oportunidad interpretada por Los Chalchaleros, conjunto folklórico hoy desaparecido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario